domingo, 13 de mayo de 2012

Bakumatsu Kikansetsu Irohanihoheto


   Buenos días, parece que el verano se ha adelantado un poco, por lo menos donde yo vivo. Sé que ya hay quien está haciendo sus planes para el periodo estival, yo me incluyo entre ellos. Al tener más tiempo libre uno siempre piensa que puede hacer mil cosas, pero la verdad es que al final no llegas a hacer ni la mitad. Es lo normal. Bueno, hoy no me quiero enrollar mucho así que vamos directamente al grano.
   Japón, Yokohama, 1868. Seguramente mucha gente no tenga ni la menor idea de que lo que pueda tratar este anime con sólo estos tres datos. Pero los que se hayan interesado un poco por la historia del país del Sol Naciente puede que les suene de algo, ya que se trata de uno de los momentos históricos más intensos de Japón y me atrevería a apostar que es sobre el que más anime y mangas se han basado.
    Estoy hablando del período Bakumatsu ¿por qué es tan importante? A parte de estar lleno de grandes acontecimientos, su término dio lugar a la era Meiji, a partir de la cual Japón pasó de su época de feudalismo y aislamiento con el resto del mundo a convertirse en una gran potencia cambiando también su estructura política. Si no hubiera habido Bakumatsu no sé qué hubiera sido de Japón, seguiría siendo una país anclado en las viejas costumbres y no estaría tan occidentalizado.
   Suena apasionante ¿verdad? Pero esto no es más que un escueto resumen de la historia de esa época ya que en ella intervienen una gran cantidad de personajes, tanto japoneses como extranjeros, que aportaron su granito de arena. Es difícil encontrar algún libro que narre con detalle lo ocurrido, pero si tienen alguna posibilidad de adquirir alguno, les recomiendo que lo lean.
   Lo poco que sé del Bakumatsu y la era Meiji se lo debo a mi afición por el manga y un poco de información que he ido sacando de varias páginas de Internet de aquí y de allí. Otros animes que tratan sobre esta época, los cuales recomiendo ver, y que espero poder comentar en mi blog, son: Rurouni Kenshin (cómo no), Hakuouki Shinsengumi Kitan, Peacemaker Kurogane, Sumarai Gun, Fuyu no Semi (género yaoi), Hijikata Toshizou: Shiro no Kiseki, etc. Incluso la película El último samurái con Tom Cruise aborda el tema, pero es un poco posterior a la entrada de la era Meiji, digamos que los últimos colectivos que quedaban de samurái que acabaron desapareciendo.
   Aunque todas estas historias están basadas en hechos reales, al tratarse de una obra de ficción se introducen elementos fantásticos en muchas de ellas, como sucede en Bakumatsu Kikansetsu Irohanihoheto, por supuesto.
   Este anime nos presenta la historia de venganza llevada a cabo por una compañía de teatro ambulante llamada Yuyama. La protagonista femenina, Kakunojo Yuyama, junto con su amigo de la infancia, Zukin Ebisu y Zagashira, un hombre de mediana edad que ayudaba a los padres de Kakunojo, son los que crean la compañía. El motivo de esta venganza está en otro hecho histórico en Japón, conocido como las Purgas de Ansei (1858-1859). En este incidente todo aquel del que se sospechase que estaba en contra del, por aquel entonces, gobierno japonés fue ejecutado brutalmente. Entre los fallecidos se encontraban los padres de la pequeña Kakunojo.
   Así y de esta manera, comenzaron a vagar sin rumbo en busca de alguna oportunidad en la que poder vengarse del asesino que arruinó sus vidas. Poco a poco se van uniendo a ellos más aliados: Seijirou Yuyama, realmente se llama Kozo Shiranui, un proscrito que se cambió el nombre tras formar parte de la compañía. En realidad es un mujeriego que se acostaba con la mujer de un policía, cuando éste se enteró del engaño mató a su mujer y lo acusó del asesinato. También tenemos a Keishin Kakashi, musculoso y fortachón tiene un gran corazón ya que se hizo cargo de Benimaru y Kobako, un par de niños sin porvenir que también participan en las representaciones teatrales y por último tenemos al personaje más misterioso de todos, Soutetsu Ibaragi.
Soutetsu Ibaragi ¿qué esconde en realidad?
   Soutetsu se une al grupo alegando la necesidad de alguien que escriba las obras a representar y él es muy buen escritor, pero detrás de este interés por formar parte de una pobre compañía ambulante se esconde algo aún más tenebroso…
   Hay una leyenda de origen chino que cuenta que hace más de 2000 años cierto hombre fue decapitado por oponerse al primer emperador de China Quin Shi Huang. Antes de morir juró que su alma sobreviviría tras la muerte y así fue. Su espíritu permaneció en su cabeza, la cual empezó a ser llamada “La Cabeza del Señor”. Para luchar contra la amenaza de “La Cabeza” se le encargó al hechicero de la corte, Xu Fu, que buscara una manera de acabar con ella, por lo que creó una espada para sellarla.
   Cuando la lograron capturar con la ayuda de la espada, Xu Fu tomó la cabeza sellada dentro de una vasija especial y comenzó un viaje en busca de la inmortalidad hasta llegar a Japón. Tras la muerte de Xu Fu “La Cabeza” fue pasando de mano en mano cada vez que una época turbulenta y violenta tenía lugar en Japón. Se dice que “La Cabeza” disfruta creando confusión, por lo que siempre intentará desatar un conflicto y hay algunas personas que tienen interés en que eso suceda.
   Actualmente la cabeza está en posesión de Jube Nakaiya, un extraño comerciante de Yokohama, cuyo verdadero nombre es Sennosuke Kuroiwa, que se creía que había muerto en 1861 pero que reaparece en 1868 con la ayuda de “La Cabeza”. Mantiene relaciones con el escocés Thomas Blake Glover y más tarde con Takeaki Enomoto, ambos personajes históricos reales.
   Después de todo lo expuesto la pregunta es: ¿Qué tiene que ver “La Cabeza del Señor” con la compañía teatral ambulante? Pues es casi un encadenamiento de coincidencias: Soutetsu se unió a la compañía porque estaba buscando “La Cabeza”, escribía guiones de obras teatrales sobre el origen de la misma y su relación con los acontecimientos que estaban sucediendo en Japón en aquel momento para plasmar además la historia de venganza de la compañía, ello implicaba que en las obras intervinieran personajes reales, entre ellos el asesino de los padres de Kakunojo, que en realidad no hizo más que obedecer órdenes, por lo tanto, el verdadero enemigo era el jefe del asesino ¿quién era el jefe? Pues Jube Nakaiya, el que tiene en su poder “La Cabeza del Señor”.
   Espero que mi explicación haya sido lo suficientemente clara como para poner a los lectores en antecedentes, porque esto no es más que una parte de todo lo que sucede a continuación. Al tratarse de una serie larga de 26 capítulos que, además trata un tema tan interesante, la trama se complica mucho, obviamente siempre es mejor ver que contar, por eso intentaré dar lo mejor de mí para hacer una reseña a la altura de este anime, aunque les aconsejo que lo vean.
Kakunojo, Youjiro y Soutetsu
   Siguiendo con la historia, también hace su aparición un muchacho joven y apuesto con una katana muy singular, su nombre es Youjiro Akizuki, el protagonista masculino, y tiene la misión de sellar “La Cabeza”. La espada que porta recibe el nombre de “La Espada de la Lágrima de La Luna” y parece que llora después de cada combate, por eso su nombre. Posee en la empuñadura un amuleto que vibra ante la cercanía de “La Cabeza”. Tal vez ya lo hayan adivinado, se trata de la espada creada por Xu Fu, lo que convierte a Youjiro en el “Asesino Eterno”.
   Youjiro acaba accidentalmente relacionado con la compañía de teatro ambulante y sus integrantes, pero gracias a esta casualidad su trabajo de hallar “La Cabeza” es más fácil (o eso parece). Muchas veces tiene que salvar a Kakunojo de ser asesinada lo que provoca que la chica empiece a sentir algo por él.
   Los acontecimientos comienzan a suceder y en una negociación entre las fuerzas que apoyaban al Emperador y las que apoyaban al Shogun, “La Cabeza” hace su aparición en dicha reunión, llevada por Nakaiya. También intervienen la compañía Yuyama, Akizuki, un pistolero mitad japonés y británico llamado Sakyonosuke Kanna que se convierte en el rival de Akizuki y, por supuesto, Soutetsu Ibaragi que se hace con “La Cabeza”, objetivo que perseguía desde el principio.
   Después de la desaparición de “La Cabeza” a manos de Soutetsu la compañía Yuyama se traslada a Nagasaki en dónde representan su última obra. En ella consuman su venganza y no actúan sino que cada uno se representa a sí mismo en el escenario. De esta manera logran acabar con Nakaiya, aunque pierden a Ebisu, por lo que la compañía se acaba disolviendo.  
   Podemos decir que este evento nos lleva a la segunda parte de la serie, a partir del capítulo 14. Ahora “La Cabeza” ha poseído a Takeaki Enomoto y vamos a ver cómo se comporta durante la efímera República de Ezo, acompañado por Soutetsu y el francés Jules Brunet y perseguido por un reducido grupo de élite del Imperio Británico, liderados por el pistolero Sakyonosuke Kanna.
   Youjiro tiene que ir hacia el Norte en busca de “La Cabeza” y Kakunojo se arma de valor y lo sigue, para entender sus sentimientos hacia él y creo que para entender los sentimientos de él hacia ella. En su camino descubren un santuario oculto debajo de una cascada, dónde se supone que dormía la cabeza hasta que la liberaron del sello. Allí curiosamente hay otra espada, una kodachi, que es un poco más pequeña que una katana, con el mismo amuleto que “La Espada de la Lágrima de La Luna” que hechiza a Kakunojo.
   Con esta otra espada, que no deja de inquietar a Youjiro, continúan su viaje en dónde se topan con otro personaje histórico Toshio Hijitaka, miembro del Shinsengumi. Hijikata acaba uniéndose a Enomoto que, como ya había dicho, está bajo la influencia de “La Cabeza”. Youjiro y Kakunojo se unen a los hombres que quieren seguir a Enomoto y suben al barco en el que él se encuentra. Obviamente la intención de Youjirou es sellar “La Cabeza” y acabar con la maldición.
   En este momento ocurre algo inesperado, “La Cabeza” libera su poder y usa la kodachi de Kakunojo para manejar a la chica como un títere y herir a Youjiro. Sí, Kakunojo sin darse cuenta de sus propios actos desenvaina e hiere al “Asesino Eterno” en la espalda. El chico no puede creer lo que ha sucedido y cae al mar confundido y moribundo. Kakunojo cuando vuelve en sí se echa a los gritos porque no puede creer que haya matado al chico del que está enamorada. Así vemos como la desdichada Kakunojo no puede conciliar el sueño en un hospital en Hakodate en dónde es vigilada por Tetsunosuke  Ichimura, otro personaje real que fue el paje o ayudante de Hijikata.
   Mientras tanto, la historia sigue su curso y Enomoto se hace con el control del Goryoukaku, el castillo que se convirtió en la base principal de la breve República de Ezo. Por si se han liado un poco, he de decir que Enomoto, Hijikata y las demás personas que lucharon y formaron parte de la República de Ezo estaban a favor del Shogun y se oponían al nuevo gobierno en el que el Emperador tenía el control.
   Mientras tanto los integrantes de la disuelta compañía Yuyama se reúnen con Kakunojo en Hakodate a petición de Soutetsu. El final está próximo, pero falta alguien ¿qué ha sido de Youjiro Akizuki? Como era de esperar vive, aunque está mal herido. Tras un par de episodios fuera de escena regresa a la acción. Y lo hace aprovechándose de otro hecho histórico sucedido en Marzo de 1969 en la batalla naval de la Bahía Miyako.
   En esta batalla los rebeldes de Ezo querían hacerse con el acorazado Kotetsu que estaba bajo las órdenes del Emperador, pero fracasaron a consecuencia del uso de las ametralladoras Gatling y el mal tiempo. Volviendo a la ficción, Youjiro se encuentra a bordo del Kotetsu y lo que necesitaba era un encuentro entre ambas tropas enemigas para poder tener su oportunidad y embarcarse en una de las naves de la República para así llegar hasta Hakodate. Y así sucede.
   Sin tiempo que perder el “Asesino Eterno” comienza de nuevo a buscar a Enomoto para intentar sellar de una buena vez “La Cabeza”, pero Soutetsu evita que lleve a cabo su misión usando a Kakunojo como escudo de Enomoto. De esta manera Youjiro y Kakunojo se vuelven a encontrar, pero como enemigos ¿qué pasará entre ambos?
Kanna, el pistolero.
   También somos testigos de cómo el pistolero Sakyonosuke Kanna y su grupo de élite es aniquilado a consecuencia del poder de “La Cabeza”, sólo se salva Kanna y cae bajo el influjo maligno contagiado por Kakunojo, que ahora viste con armaduras blancas y una peluca rubia, interpretando el papel de Juana de Arco. De esta manera convence a los samuráis y la población de Hakodate de la importancia de defender la República frente a los ataques de las fuerzas imperiales que cada vez están más cerca.
   Hijikata tiene la corazonada de que pronto va a terminar todo, por lo que le ordena a su paje Tetsunosuke que se marche del campo de batalla y le da una foto y una carta para Kaishu Katsu. Así asistimos a la muerte de esta gran figura del Bakumatsu, Hijikata, que muere en Hakodate. Se cree que iba a caballo y le dispararon en la zona lumbar, en Bakumatsu Kikansetsu Irohanihoheto también muere por un disparo, pero usan al personaje de Kanna como autor del asesinato. Youjiro ve lo ocurrido y de nuevo lucha con Kanna, hiriéndole, lo que provoca la muerte del joven.
   En esta parte final, la ficción aparece de manera más notoria ya que al Goryoukaku le crece una armadura gracias a la fuerza de “La Cabeza” ampliada por el poder que emana la kodachi que posee Kakunojo. Pero esto no es problema para el “Asesino Eterno” pues logra penetrar en la fortaleza y es entonces cuando tiene que enfrentarse a Kakunojo que aún viste como Juana de Arco. Una lucha intensa en la que al final, el Yang que posee la espada de Youjiro supera al Yin de Kakunojo. Con ambas espadas en su poder el “Asesino Eterno” logra enfrentarse con “La Cabeza” que había dejado de poseer a Enomoto para controlar a Soutetsu. Tras una pelea difícil logra sellar "La Cabeza", como precio a su ambición Soutetsu muere.
   Y así, termina Bakumatsu Kikansetsu Irohanihoheto. Era el final que todos esperábamos, el bien triunfa sobre el mal y todo el mundo es feliz. Pero ¿Qué pasa con Youjiro y Kakunojo? Ella vuelve a actuar con la compañía Yuyama en Yokohama y él se dispone a zarpar para ver el mundo que hay más allá de Japón. Hermosa escena de despedida en el puerto, los sentimientos salen a flote, pero los dos deben recorrer su camino y, sin duda, se volverán a encontrar.
   Es obvio que estamos ante una serie con muchos personajes, gran parte de ellos existieron realmente. He de decir que el diseño de la serie en general me gustó mucho y que los personajes históricos se ajustan mucho a la realidad. He buscado información de alguno de ellos y realmente han hecho un esfuerzo porque el parecido es impresionante. Por si les interesa averiguar algo más les nombro a Ryoma Sakamoto y su esposa Oryou, Kaishu Katsu, Jules Brunet, Souji Okita, el inglés Parkes, Toshio Hijikata, Tetsunosuke Ichimura… y muchísimos más.
   Supongo que ha quedado claro que el anime de Bakumatsu Kikansetsu Irohanihoheto me ha gustado muchísimo. Casi que la calificaría de obra maestra y la recomiendo 100%, no se la deben perder. Me atrevería a decir que el estudio Sunrise se consagró con esta serie porque el tema, la animación, los personajes en fin, todo en su conjunto es una maravilla. La banda sonora es una delicia, temas principalmente melódicos en los que se combinan los instrumentos japoneses, como la flauta o el shamisen, con orquesta sinfónica.
   Lo que no puedo entender es cómo una obra tan maravillosa no ha tenido tanta aceptación como otros títulos, me imagino que puede ser por la complejidad de los hechos narrados, ya que debes de saber algo de historia japonesa para poder entender lo que sucede, pero no por eso desmerece de un poco de atención. Sin nada más que añadir les deseo mucha suerte y espero que para la próxima entrada no pase tanto tiempo.

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