jueves, 31 de enero de 2013

Shiki


   ¡Feliz 2013! Primera entrada de este nuevo año, he tardado un poco en volver a escribir algo pero “más vale tarde que nunca” ¿Cómo pasaron las Navidades? Espero que muy bien, rodeados de las personas que más quieren y deseo que este año les traiga todo lo mejor. Para mi han sido unas Navidades de lo más ajetreadas, no esperaba que fueran así, pensé que tendría más tiempo para mis cosas, pero ha ocurrido todo lo contrario ¡Qué agobio! En fin, ya han terminado y ahora volvemos a la rutina. Pero no se crean que todo este tiempo he estado ocupada, siempre hay un huequito para aquello que tanto me gusta: para ver anime. Hoy les traigo una serie, Shiki, así que si siguen leyendo es bajo su responsabilidad.
   Este anime está sacado de una novela que consta de un total de 5 volúmenes, fue también adaptada al manga con 9 tomos y a un anime con 22 episodios más 2 Ovas y yo voy a hablar de ésta última adaptación. La historia se desarrolla en un pequeño pueblo del interior de Japón llamado Sotoba a finales del verano. En las afuera del núcleo urbano hay una extraña mansión con aire occidental llamada Kamemasa a la que se acaban de mudar sus nuevos inquilinos, la familia Kirishiki, formada por un matrimonio con una única hija y un par de sirvientes. Acto seguido conocemos poco a poco a los habitantes de este pueblo de la mano de Megumi Shimizu, una adolescente de 15 años que lo único que quiere es salir del odioso lugar en el que se ha criado. Está enamoradísima de Natsuno Yuuki, un chico de su misma edad que se ha mudado hace poco proveniente de la ciudad, pero él no da muestras de interesarse por Megumi ni por la gente del pueblo. Harta del aburridísimo espíritu de Sotoba se encamina hacia la mansión de Kamemasa, dispuesta a relacionarse con gente más urbanita. Sin embargo, la chica desaparece y, cuando la hayan tendida en medio del bosque, parece muy enferma. Tras atenderla el doctor Toshio Ozaki, le diagnostica anemia y le pide que descanse, pero la pobre Megumi muere un par de días después. Gran conmoción para el pequeño pueblo, ya que una chica tan joven perdió la vida solo a causa de una anemia. Esto intriga al doctor Ozaki, que no puede creerlo, y más aún se sorprende cuando comienzan a sucederse más muertes en situaciones extrañas. Los síntomas comienzan con una anemia y un poco de cansancio y un par de días después la persona muere ¿Se trata realmente de una epidemia?
   Otra persona que también siente curiosidad por las muertes es Seishin Muroi, amigo del doctor Ozaki y monje local. Además es novelista y en sus libros habla de Sotoba, algo que ha llamado mucho la atención de la hija del matrimonio recién mudado a Kamemasa, Sunako, una niña tenebrosa, que da mucho miedo, pero que se hace la simpática con Seishin y traban amistad, coincidiendo la mayoría de las veces dentro de una iglesia de estilo occidental. Ella lo alaga y le explica por qué una niña de su edad vaga sola por la noche: tiene una enfermedad que la hace vulnerable a los rayos del sol ¡Qué enfermedad tan rara ¬_¬!
   Mientras tanto, las muertes de los habitantes de Sotoba se van sucediendo extrañamente mientras Natsuno se siente inquieto: no puede dormir por las noches. Cuando Megumi vivía solía espiarlo a través de su ventana, mientras estaba escondida en los matorrales. Ahora, a pesar de estar muerta, Natsuno siente que ella sigue ahí. El cansancio se le acumula, así que decide ir a casa de su mejor amigo, Tohru Mutou y pasar la noche. Mientras duermen siente algo, una presencia que entra en la casa de su amigo y penetra en la habitación en la que ambos duermen. Es Megumi. Su apariencia ha cambiado y hay algo inquietante en ella. Natsuno no sabe si lo que está viendo es la realidad o una ilusión, pero es testigo de cómo la chica muerde a su mejor amigo en el cuello, como si fuera un vampiro. A la mañana siguiente no hay rastro de lo sucedido esa noche en el dormitorio, no obstante, Tohru cae enfermo de anemia y termina muriendo. Esto comienza a corroer la conciencia de Natsuno, que baraja la hipótesis de que Megumi haya vuelto a la vida como una zombi o un vampiro y así se lo manifiesta al doctor Ozaki, el cual se da cuenta, en ese momento de que lo que Natsuno apunta, a pesar de parecer descabellado, puede ser muy cierto.
   A la misma vez Kaori y Akira Tanaka, dos hermanos residentes en Sotoba, intentan trazar un plan para entrar en la mansión Kamemasa pues el más pequeño de los dos, Akira, afirma que hay algo extraño con sus nuevos inquilinos. Ambos son sorprendidos por Natsuno, el cual les indica que están siendo vigilados, mientras hablan intercambian ideas y se dan cuenta de que piensan igual: Megumi está viva y hay una extraña conexión entre ella y Kamemasa. Pero ¿cómo verificar si sus sospechas son reales? Deciden desenterrar el ataúd de Megumi y comprobar si su cadáver sigue dentro. Esto no le hace mucha gracia a Kaori, que era amiga de la infancia de la difunta, pero participa de todos modos. Tras una larga y ardua tarea descubren que el ataúd está vacío. En ese momento Kaori es atacaba por una persona extraña y salvada por Natsuno. Quien le ha atacado es un hombre que no parece respirar y que está frío como el hielo, eso quiere decir que está muerto ¿verdad? Abandonan el cuerpo del atacante en medio del bosque y vuelven al día siguiente para comprobar que ya no está allí. Ahora Natsuno, Kaori y Akira son conscientes de que la leyenda del pueblo sobre los zombis está cobrando “vida”. Y podemos ver de primera mano, a través de la propia muerte y posterior resurrección de Masao Murasako, un joven muy introvertido y celoso, al que su familia rechaza, cómo se produce el cambio de humano a zombi. Él fue atacado por el bibliotecario ya convertido en medio de la noche y, las noches siguientes, su atacante lo llamaba desde fuera de la ventana y Masao, a pesar de no querer, se veía obligado a abrir la ventana para que el bibliotecario lo mordiera y chupara su sangre hasta matarlo. Una vez muerto despierta para su sorpresa dentro de un ataúd, del que no puede salir, por lo que se pone muy histérico (algo que es normal en él) hasta que alguien levanta la tapa, ese es Tatsumi, sirviente de la familia Kirishiki. Él le explica todo acerca de su nueva condición: que morirá si le llega la luz del sol, que es alérgico al ajo, que no podrá soportar las cruces ni los signos religiosos, no puede entrar en ninguna casa sin permiso del dueño y que sentirá una insaciable sed de sangre humana. Si se dan cuenta, todas éstas características son propias de los vampiros ¿pero no son zombis? Zombis, levantados, vampiros, okiagari o shikis es lo mismo en esta serie: hace referencia a un muerto que resucita. En el anime adoptan el término shiki para referirse a los resucitados y además sirve como título ;-).
   A la misma vez que suceden estos acontecimientos podemos ver como el doctor Ozaki asume los casos de anemia desde otra perspectiva, ahora que está más que convencido de que los zombis son los causantes de las muertes más que una epidemia, comienza a cambiar su táctica y, por supuesto, hace partícipe de sus sospechas a su amigo Seishin, el cual no duda en ayudarlo. Para ello mantienen a una paciente, con síntomas de anemia, bien vigilada. Tras varios días de recuperación la mujer se encuentra mucho mejor, pero algo ocurre: en medio de la noche, alguien llama a la enferma y esta, como si tuviera un resorte en su interior, se dirige a la ventana dispuesta a abrirla para dejar pasar a “aquello” que la está llamando. Obviamente Ozaki y Seishin lo impiden y descubren que una de las difuntas fallecida hace poco, familiar de la enferma, está intentando penetrar en el hospital para alimentarse de su sangre. Consiguen ahuyentarla negándole la entrada al hospital, pero lo peor está por llegar. Pocas noches después reaparece la zombi con los demás fallecidos del pueblo convertidos y, con la ayuda de Tatsumi, el cual parece que los lidera, consiguen que el cuerpo de la paciente escape de dentro del hospital y acaban matándola. Tras esta nueva muerte a Natsuno, Kaori y Akira solo les queda cerciorarse de que la anciana fallecida se convierta en shiki también. Pero al llegar esa noche a su casa, Natsuno descubre que su padre ha dejado entrar a una extraña niña que ha anunciado que su “hermano” iba a ir más tarde para luego desaparecer misteriosamente. Esto huele a chamusquina y Natsuno lo sabe. Todo forma parte del plan de Tatsumi. Como el joven se ha dado cuenta de la existencia de los shikis es preciso eliminarlo ¿de qué manera? Convirtiéndolo a él mismo en un shiki. Pero Megumi no está conforme con la actitud que está tomando Tatsumi hacia su amado, ya que ella es quien quiere morder su cuello. Pero no es la elegida, sino Tohru, su mejor amigo. El bueno de Tohru se niega, pero las circunstancias lo obligan y, al final lo acaba mordiendo.
Algunos personajes de Shiki, empezando por arriba y de izquierda a derecha: la primera Nao, Megumi, Akira, Seishin, Natsuno, Chizuru y Kanami. En la hilera de abajo Satoko, Kaori, Tohru, Tatsumi, Toshio, Ritsuko y Masao.
   Desde que los colmillos de su amigo penetran en su piel, Natsuno sabe que está condenado. Se lo cuenta a sus amigos, Kaori y Akira, que lo intentan ayudar, sin éxito a causa de la intromisión, una vez más, de su propio padre (que hombre tan poco responsable). Para nuestro pesar, Natsuno muere. Lo mejor es la forma en la que se entera su padre de que su hijo ha fallecido: llega de la calle y descubre una nota de su mujer en la que le dice (tan fríamente) que ya que su hijo ha muerto lo abandona porque no soporta más la vida que lleva en este ridículo pueblo ¡Qué mujer más insensible! ¡Vaya perlas de padres que tiene el pobre Natsuno! En fin, la muerte del protagonista es pronto sabida por sus amigos Akira y Kaori, que echan toda la culpa al progenitor del muchacho (y con toda la razón). Megumi también se entera de este hecho y, como han pasado los días sin saberse nada del muerto, piensan los shikis de Sotoba que el padre de Natsuno, al ser de ciudad, ha llamado a una funeraria fuera del pueblo en la que normalmente incineran a los cadáveres. De esta forma los muertos no pueden resucitar. Mientras tanto la propia mujer del doctor Toshio cae repentinamente enferma. El doctor sabe bien lo que le sucede y mantiene en secreto el verdadero estado de su esposa, la cual piensa usar como conejillo de indias para poder averiguar los puntos flacos de los shikis. Sin embargo, duda de que su esposa se convierta finalmente en un zombi y, la mantiene muerta en el propio hospital casi una semana. Cuando se da cuenta de que se ha transformado les dice a los demás empleados que no acudan a trabajar, que quiere estar las últimas horas de vida con su mujer, cosa que es cierta, hasta determinado punto.
   Teniéndola atada en la sala de operaciones de la clínica y grabando todas sus pruebas comienza con los experimentos; eso incluye heridas, someterla a objetos religiosos y otras pruebas. Hasta que finalmente da con la manera de matarla: clavando una estaca en su corazón. En ese momento su amigo Seishin entra en la sala de operaciones y descubre al médico cubierto de sangre junto al cadáver de su esposa. El doctor le pide su ayuda para recoger todas las pruebas, pero Seishin se da media vuelta y se marcha. Hay una gran brecha entre ambos amigos que se ha creado desde el comienzo de los casos de muerte por epidemia. Toshio quiere detener las muertes y acabar con su origen, mientras que Seishin siente empatía por estos seres, algo que se debe a Sunako, la cual le ha ido lavando el cerebro y haciéndole ver que tratar de “vivir” no es un pecado, contando con todo lo que dicha palabra pueda implicar. Es más, el propio Seishin sabe que Sunako y su familia son shikis y no los desprecia, esto le salva de que Sunako lo muerda. Tras la muerte de la esposa del doctor, se organiza el funeral, pudiendo ver ahora a un Toshio mucho más decidido a acabar con los shikis puesto que ya sabe el proceso que siguen para crearse y sabe cómo matarlos. También advierte el bueno de Toshio, que poco a poco la población de Sotoba ha ido cambiando: los habitantes que se han ido son reemplazados por otros que suelen tener una vida más nocturna ¿extraño? No tanto, los shikis se han vuelto cada vez más numerosos y poco a poco se están haciendo con el pueblo. Hecho que le queda más que patente a Toshio cuando es abordado por los propios shikis y por la señora Kirishiki, Chizuru. Se trata de una exuberante mujer, muy provocativa que se considera a sí misma una gourmet y que muy pronto irá a visitarlo. Esa misma noche, mientras el doctor descansa en el jardín oye unos pasos, sin duda se trata de Chizuru, cuanto se sorprende al abrir los ojos y encontrarse con ¡Natsuno!
   ¿Qué se creían? El protagonista no puede morir tan fácilmente. Ahora, como ya habrán deducido es un shiki, pero no uno cualquiera, es un “hombre lobo” al igual que Tatsumi: ambos pueden moverse bajo la luz del sol y comer comida normal, aunque deben beber sangre para poder usar sus poderes. Natsuno le hace saber al doctor que lo va a ayudar a matar a los shikis y eso lo incluye a él mismo. Mientras tanto, las muertes no han dejado de sucederse y nuestra querida Megumi recibe un trabajo especial: atacar al señor Tanaka, padre de Kaori y Akira, y lo hace encantada, ya que ha descubierto que su antigua amiga se hizo muy íntima de su amado Natsuno en los últimos tiempos. Irremediablemente el hombre muere, por supuesto, sus hijos saben los motivos que hay tras su fallecimiento y, cuando resucita, Megumi le sugiere (maliciosamente) que se alimente de su propia familia, por lo que el señor Tanaka ataca a su mujer. Nuevamente sus hijos se dan cuenta de lo que sucede y el pequeño Akira sale en busca de amuletos para proteger a su madre y evitar que muera. En su camino oye chismes de una nueva muerte, así que se hace con una estaca de madera y va hacia una casa que supuestamente está deshabitada, allí encuentra a un cadáver que pronto resucitará e intenta acabar con él. Pero alguien se lo impide, ese es Tatsumi que amarra al chico y lo deja allí, para que le sirva al shiki de alimento cuando despierte.
   ¿Sobra decir que el muchacho es salvado? ¿Se imaginan por quién? Tatsumi si, y va a la casa de Natsuno. Al abrir la puerta, el desquiciado padre lo acuchilla, Tatsumi ni se inmuta y entra en la casa para tener una pequeña charla con Natsuno y advertirle de que deje de hacer cosas por su cuenta y se una a los shiki que el mismo lidera o, de lo contrario, tendrá que eliminarlo. De vuelta a la clínica, el doctor es finalmente visitado por la voluptuosa Chizuru, que lo muerde y le da cuidadosas instrucciones para que destruya todos los certificados de defunción que él mismo ha firmado para no levantar sospechas fuera del pequeño pueblo. A pesar de que su destino ya está echado, Toshio intenta resistir haciéndose transfusiones de sangre. Como último deseo antes de morir, le pide a Chizuru que lo acompañe a una especie de cita para que pueda admirar un festival propio del pueblo. Ella acepta encantada, sin saber la trampa que le espera. Al llegar al santuario Chizuru se siente cada vez más intranquila hasta que se quiere ir, aquel lugar no le da buena espina y teme por su existencia. Le ordena a Toshio que la saque de allí, pero él, lejos de obedecerla la descubre ante los aldeanos y todos comienzan a darse cuenta que la leyenda de los okiagari es cierta ¿Cómo puede el doctor desobedecer a Chizuru? Al fin y al cabo ha sido ella la que lo ha mordido, pero el astuto doctor le muestra otra marca de mordida en su brazo, alguien lo ha mordido después que ella y ahora no tiene la obligación de obedecer sus órdenes. Ya se imaginan de quien se trata ¿verdad?
   En los capítulos finales asistimos a lo que llevamos esperando desde el principio: por fin los aldeanos se dan cuenta de lo que sucede con la familia Kirishiki y comienzan su venganza liderados por Toshio. Se inicia una caza de shikis sin cuartel, ninguno se salva, son atravesados con estacas, quemados al sol y enterrados en una fosa común. Los humanos que aún habitan en Sotoba colaboran en la tarea sin descanso y de manera eficiente, por supuesto, topan con algunos contratiempos, pero en general logran alcanzar su objetivo poco a poco. También queda patente el comportamiento humano que suele derivarse de estas situaciones tan extremas: cuando un grupo de personas trabajan en equipo para lograr un bien común, cualquier obstáculo hay que quitarlo de en medio y eso puede llevar a matar a otros seres humanos ya que la racionalidad no está presente en medio de tanta violencia. Hecho que podemos constatar cuando la madre de Seishin y los demás sirvientes del templo son asesinados injustamente por creerlos aliados de los shikis. Uno a uno todos los zombis son cazados y aniquilados, incluso Megumi y Tatsumi, el cual se enfrenta a Natsuno y ambos mueren cuando este último enciende la mecha de una bomba haciéndola explotar dentro de la fosa común en la que quedaron atrapados. Final triste para el protagonista, pero muere como un héroe, como debe ser. Sin embargo ¿qué ha sido de la pequeña Sunako? Por suerte para ella logra escapar gracias a la ayuda de Seishin. Sí, la niña manipuladora sale ganado con un aliado que la idolatra. Seishin acaba convertido en hombre lobo y logra salvar a la pequeña en el último momento, ambos abandonan Sotoba salvando así sus vidas. Seguramente huirán a otro pequeño pueblo en donde intentarán convertir a toda la población en shikis.
   Sunako no es un personaje que me agrade, tiene el papel de niña desvalida que quiere dar pena a los demás, pero en realidad es un monstruo y usa a las personas para su propio beneficio. Seishin me parece una persona débil y sin carácter, un blandengue que se deja engañar por la manipuladora Sunako. El doctor Toshio, por el contrario, me parece un hombre cabal, llegando a ser obsesivo con el tema de la caza de los shikis, me recuerda al doctor House, pero me cae bien. Natsuno, como ya dije, es el típico héroe que da su vida por el bien de los demás, pero también me cae bien. Kaori y Akira, que sobreviven gracias a la ayuda de Natsuno, me gustan, son dos hermanos muy unidos que luchan juntos incluso tras perder a sus padres. La tímida Kaori se hace fuerte tras vivir la experiencia de luchar contra los shikis, algo que la hace madurar. Y del resto de habitantes de Sotoba ¿qué puedo decir? Hay para todos los gustos.
   Final de la serie en su capítulo 22 que me dejó con ganas de otro episodio más. La aldea se quema por completo con los cadáveres de los shikis en ella y los aldeanos logran escapar, pero lo han perdido todo. Fin. En mi opinión un capítulo que contara un poco como volvió a ser la vida en Sotoba después de los hechos ocurridos no hubiera estado de más. Ni siquiera los dos Ovas resuelven este misterio, simplemente relatan los sucesos finales de la historia desde el punto de vista de dos personajes más secundarios. A pesar del abrupto final la serie me gustó mucho. El género de terror no es muy habitual en el anime, sin embargo reconozco que Shiki me dejó en más de una ocasión con ganas de ver el capítulo siguiente y en los episodios finales la violencia y la sangre (aunque sea de dibujos) abundaron muchísimo. Es un argumento algo manido al tratarse de vampiros o zombis, pero la forma de abordar la historia es entretenida y está bien llevada. La recomiendo sinceramente. Además la música es muy bonita, podemos escuchar a la más que consagrada banda de Buck –Tick, que me encanta, tanto en el opening como en el ending.
   Nada más que añadir. Sean felices, perdonen mi tardanza y esperen mi próxima entrada con ilusión. Nos vemos.

4 comentarios:

  1. Hola, al final Natsuno muere ya que no se ve si prende la dinamita (solo enciende el encendedor)y tampoco muestran por decir la "explosión" ¿? para mi... su final me decepciono ya que esperaba algo mas sorprendente! :/ no se... es solo mi opinión y la parte que me da penda es cuando matan a Tohru y la enfermera, aj maldita vieja gorda que los delata, D: la enfermera la hubiese matado

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    1. Si, al final creo que Natsuno muere, aunque si nos fijamos bien, de mitad hacia el final pierde bastante protagonismo. Quizás un final diferente o con un poco más de acción en la que interviniera él le hubiera dado a la serie un broche final espectacular, aunque nos tenemos que contentar con lo que hay. Un saludo. :-).

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  2. Hola!

    Hemm,tengo una duda,al final,se supone que el monje se convierte en hombre lobo no? Pero eso paso por que fue mordido pero no matado,igual que natsume,entonces mi duda es,entonces el doctor que también fue mordido 2 veces pero no murió,también debio convertirse en un hombre lobo,no?

    Por favor alguien que me avlare esa duda se lo agradecería mucho!^^

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  3. Hola!

    Hemm,tengo una duda,al final,se supone que el monje se convierte en hombre lobo no? Pero eso paso por que fue mordido pero no matado,igual que natsume,entonces mi duda es,entonces el doctor que también fue mordido 2 veces pero no murió,también debio convertirse en un hombre lobo,no?

    Por favor alguien que me avlare esa duda se lo agradecería mucho!^^

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