Sora Log (Pasión Bajo Las Estrellas)

   ¡Hola de nuevo! ¿Cómo están? Espero que bien, a pesar de la que está cayendo, por lo menos en España. No dejo de perder la fe en que todo mejore, sé que es difícil que suceda, pero al menos así me gustaría que fuese. Demasiada corrupción, demasiadas desgracias, demasiadas desdichas… No me suelo caracterizar por hacer muchos comentarios de este tipo, pero veo que hay un grupo de personas que están ahogando a la ciudadanía y como ciudadana lo digo. Pero da igual las manifestaciones o protestas que se hagan, las cosas no cambian. Mejor lo dejo aquí, no quisiera entrar en temas que no voy a solucionar, pero sí que tengo una opinión y me molesta mucho y me parece injusto lo que pasa. Digo esto para que no crean que mi vida gira sólo en torno al anime y al manga, está compuesta de muchas más cosas, pero como las series son agradables prefiero hablar de ellas más que estarme lamentando de la miseria en la que nos han metido y en la que cada vez nos hunden más. Desde aquí, aunque no sirva de nada, mando mi apoyo y mis ánimos a todo el que lo necesite. Como siempre, enrollándome antes de hablar de lo que realmente he venido a hablar. Disculpen.

   Ahora sí, pasamos al tema agradable. A lo que algunos nos mantiene con esa visión optimista. Sora Log es un manga tranquilo, risueño, sensible, de esos que lees varias veces por la belleza de la historia que nos cuenta. Su autora es Kako Mitsuki, de la cual he tenido la oportunidad de leer varios cómics que me han gustado mucho. Son 4 tomos que podemos encontrar en español gracias a Editorial Ivrea y que recomiendo sin lugar a dudas.

   Hikaru Minami es una estudiante muy alegre y jovial cuya pasión es el cielo y todo lo que tiene que ver con la astronomía. Cierto día en el que está sacando fotos al cielo con su móvil, éste se le cae al suelo yendo a parar a los pies de un joven misterioso que parece producir el mismo sonido que las estrellas fugaces que se lo devuelve amablemente. El muchacho es alto y tiene unas manos hermosas además del cabello de dos colores, rubio y negro, creo que esto se debe a que el chico se ha echado un bote de agua oxigenada en el pelo para aclarárselo. Esa misma noche, queda con el club de astronomía para observar las estrellas y Hikaru llega la primera, cuál no sería su sorpresa cuando se topa con el mismo chico que le devolvió el móvil. Intercambian un par de palabras y le pregunta si no sabe nada de él, pero Hikaru es muy inocente y afirma no saber nada. Ante la próxima llegada de los demás miembros del club de astronomía el joven se marcha pidiéndole a Hikaru que no le hable a nadie sobre su encuentro y sin darle más explicaciones se marcha.

   Al día siguiente, en el instituto, mientras pasea por el patio en medio de una nevada oye una nostálgica canción tocada al piano por alguien, por lo que comienza a bailar. A causa de los copos de nieve, Hikaru cae al suelo rompiendo su falda y haciéndose un daño en una rodilla. Súbitamente desde el segundo piso salta alguien que aterriza ante ella para ayudarla. Es el mismo joven misterioso de la otra noche. Gentilmente la lleva a la enfermería y, cuando aparece el posesivo hermano de Hikaru, Yui Minami, el muchacho se marcha de nuevo, pero Hikaru intenta quedar con él esa noche en el parque para observar las estrellas. Tras preguntar a sus compañeras de clase sobre el chico que la había ayudado, cuyo nombre es Minato Asou, los malos rumores sobre él no hacen sino circular. Pero Hikaru no se atemoriza y va al parque dónde se vuelven a reencontrar. Allí ella puede devolverle un cascabel que él había perdido mientras la llevaba a la enfermería.

La parejita, muy entrañable, sobre todo él.

   A partir de este momento Hikaru tratará de acercarse de manera muy amistosa al temido Asou, para asombro de todos. Él le advierte que no se relacione con él en el instituto y que ni siquiera le hable, pero la persistente Hikaru no desiste y aprovecha la oportunidad que se le presenta en la calle para estar a su lado. Es cuando se da cuenta de que Asou no es mal chico y que posee una cara amable, muy encantadora. Al día siguiente, en clase, una profesora pelea a Hikaru por relacionarse con Asou, a lo que él se echa toda la culpa a sí mismo y le advierte a Hikaru una vez más que se aleje de él. Pero la simpática chiquilla persiste y al final derriba el muro que ha creado Asou con todo el mundo y se hace un hueco en su vida. Él le dedica una bonita sonrisa y aquí tenemos el flechazo. ¡Ais! ¡Qué bonito es el amor!

   Así esta relación de atracción por parte de la animada Hikaru y el serio Asou comienza y se intensifica. Pero entonces aparece una mujer muy fina y sofisticada en el instituto, la cual se va con Asou. Hikaru los sigue hasta el aula de música y allí presencia como ambos se abrazan ¿quién es ella? Hikaru no puede ocultar su desasosiego y cae desmayada más tarde, en un encuentro casual con Asou después de haberlo evitado deliberadamente. De nuevo es llevada a la enfermería y allí Asou le explica que en realidad se trata de una cantante de ópera, Shizuka Asahina, la cual estuvo casada con su hermano mayor, Norihito, el cual falleció. Aclarado el mal entendido la distancia entre ambos decrece una vez más. Sin embargo Yui desconfía totalmente de Asou y así se lo manifiesta a su hermana, la cual acaba enfadándose con él.

   A la mañana siguiente Hikaru le pide a Asou que vayan juntos al planetario, cita que no termina bien porque está cerrado y porque a la vuelta la parejita se topa con un grupo de matones que pretenden molestarlos y con los que Asou tiene que pelear para librarse de ellos. Al mismo tiempo Yui aprovecha para acercarse a Shizuka y hablar con ella de cierto tema. Al no ver a Asou en el instituto al día siguiente Hikaru lo va a buscar a su casa, pero él la evita de manera patente. Sin embargo, eltío de Asou la invita a pasar y le recrimina a su sobrino la mala educación y también se da cuenta de que el chico está herido por querer protegerla a ella. En ese momento llega Shizuka y se enfada mucho por ver a Asou con las manos vendadas, algo que sorprende, porque lo que debería es estar preocupada. Sin embargo, el tío hecha a los jovencitos de la sala para tener una pequeña conversación con Shizuka sobre lo sucedido. En la intimidad Asou y Hikaru hacen las paces y, casi están por besarse cuando el timbre suena. Asou acude a abrir y se topa con Yui, el cual ha sido avisado por Shizuka ¿Qué sucede aquí?

   Obviamente Hikaru se enfada por la intromisión de Yui y se marcha con Asou a una sala en la que hay un gran piano de cola, allí él le toca un par de piezas, pues en su niñez fue un niño prodigio en el mundo de la música. Mientras tanto Yui le comenta a Shizuka y al tío de Asou porqué no quiere que su hermana y Asou estén juntos, a los que hace una gran revelación: Hikaru perdió parte de su memoria a causa de un trauma que sufrió de pequeña y, el causante de ese trauma, no es otro más que Asou. Por eso Yui está tratándo de aliarse con Shizuka, para separar a su hermana de un posible sufrimiento y Shizuka quiere que Asou vuelva a tocar el piano como lo solía hacer. Sin embargo, el joven no parece consciente de lo que le pasa a Hikaru, ni ella misma de la horrible experiencia que le borró la memoria en el pasado y acaban acercándose más y más hasta que terminan besándose como buenos novios. A pesar de eso, unos pocos días después cuando Shizuka se encuentra con Hikaru en el instituto le advierte que va a hacer todo lo posible para llevarse a Asou de nuevo al mundo de la música, la pequeña discusión es observada desde lejos por Asou quien le advierte a Shizuka que pare de molestar a la chica porque no se lo perdonará.

   Pero ella hace oídos sordos y continúa con su obsesión de que Asou continúe estudiando música, pero el joven deja muy claro que lo que ahora le interesa es Hikaru. Shizuka no se da por vencida y mantiene una discusión con Asou en la que él le recrimina su mal enfoque del asunto, pero ella pierde un poco el norte y casi lo besa confundiéndolo con Narihito, pero Asou la detiene a tiempo y le recuerda que su hermano murió. Hikaru, que ha oído a escondidas todo se da cuenta del sufrimiento de Shizuka y termina consolándola. Al ver que no puede hacer cambiar de opinión a Asou se da por vencida y vuelve al trabajo dentro del mundo de la música abandonando Japón. Ahora Asou y Hikaru están más unidos que nunca, tanto que al acompañarla a su casa, los padres de Hikaru lo invitan a pasar. Cuando se despiden Yui se ofrece para acompañar a Asou, pero en realidad lo que quiere es advertirle de que deje en paz a Hikaru, para no hacerla sufrir. Pero Asou no se da cuenta sobre lo que Yui le está hablando, hasta que recuerda y en ese momento corre para encontrarse con Hikaru de nuevo.

   Mientras todo esto sucede, nuestra protagonista se ha desmayado y vuelve al pasado. Allí nos encontramos con una Hikaru ingresada en el hospital que está en compañía de un dulce niño, que no es otro que Asou. Ambos comparten secretos: su objetivo es ver las estrellas fugaces juntos, para ello escapan a escondidas. Pero la felicidad del momento se ve arruinada cuando Hikaru resbala por un precipicio y, aunque el pequeño Asou intenta ayudarla, ambos caen al vacío. De vuelta al presente Asou llega al lado de Hikaru. Ella ha recordado lo sucedido y Yui aprovecha para culpar a Asou, pero entra en acción el padre de los hermanos para contar la verdad. En realidad, Asou recobró la consciencia antes que Hikaru y escaló la pendiente en busca de ayuda, pero estaba muy mal herido y lo atendieron enseguida, con lo que no pudo volver a ver a su amiguita, lo único que le dijeron es que había muerto ¡Qué crueles! Mira que dejar que el pobre Asou cargara con aquella pena de manera tan injusta y encima ¡era mentira!

   Y así concluye el drama. Dos años después, en la graduación, podemos ver a Asou tocando de nuevo el piano y con el pelo negro, su color natural, atrás ha quedado aquel pelo oxigenado que lo hacía parecer un macarra. También podemos ver a una Hikaru más madura e incluso a Shizuka, algo más calmada que se ha convertido en la manager de Asou ahora que va a iniciar su carrera como artista en Estados Unidos. Eso significa que su amada se quedará sola, pero, Hikaru es muy lista y no lo va a dejar ir solo, es más, lo acompañará para estar juntos siempre ¡Qué hermoso!

   Bonita historia, bonitos personajes y bonito final. Recomiendo su lectura, además hay un par de capítulos especiales que son tiernos, muy tiernos. Es un argumento sencillo y a la vez entrañable. Hikaru es muy optimista y alegre y Asou es… que puedo decir, amable, gentil, tierno y muy noble. Al principio se hace el chico malote (como suele pasar con muchos protagonistas masculinos), pero cuando conoce a Hikaru y ella insiste en acercarse a él, su actitud va cambiando y se vuelve dulce. Me encanta un hombre así. Me encanta Asou. Y me gusta mucho este manga. Sin más, me despido y espero escribir pronto. Un saludo y sean felices.